Publiquem avui una curiosa història que ens ha arribat per internet. Vam conèixer personalment el seu protagonista el passat 14 d'abril a la Conreria i posteriorment ens ha enviat la seva història. Es tracta de Félix Octavio Sánchez Jiménez, nascut a Barcelona el 1934 i que va estar estudiant a la Conreria de 1947 a 1952. Després baixà al Seminari Major on va estudiar fins el 1954. Aleshores va deixar els estudis de capellà i va marxar a Madrid, on viu des d'aleshores. El 1956 s'incorporà a l'Exèrcit, essent destinat a la 7ª Companyia de la Bandera Paracaidista, amb la qual va participar a la guerra de Sidi-Ifni (Àfrica) els anys 1957-1958. En assabentar-se per la web que es presentava el llibre sobre el Seminari Menor, no va dubtar en venir des de Madrid per ser-hi present aquell dia. (A la 1ª foto F. Octavio amb dos companys de la Brigada Paracaidista; a la 2ª al pati de la Conreia, el 1952). Però deixem parlar el nostre protagonista amb el text que ens ha enviat:
DE MADRID A LA CONRERIA, ABRIL 2012:
Nunca hice un esfuerzo con tanta ilusión. El viaje en el
"AVE" fué un placer : salí de Atocha Renfe a las 18,30 h y a
las 21,15 h estaba en Barcelona Sants (...) Al día siguiente viajé a
Montgat, en busca de “un tranvía" que me subiera a Tiana. Al bajar del
tren estuve un buen rato mirando extasiado MI PLAYA...allí donde alguna vez
bajamos desde La Conrería
los seminaristas. Entonces vestíamos la bata de colegial - a rayas verticales-.
Nos subíamos los pantalones hasta las rodillas y nos dejábamos
acariciar por el oleaje salado y suave. Luego paseábamos por la playa pisando
la arena con nuestros pies desnudos. Un joven de 16 años, que estaba sentado
en una parada de bús, me dijo que ese tranvía ya no existía desde hace
muchos años.
El sábado, muy temprano, subí al tren para ir a Badalona. Llegué a
las 11 h y estuve paseando por la ciudad, pues hasta las 13 horas no salía el
único bus - por ser sábado-. A las 13, 20 h llegué a la Conrería, entré y saludé
a Ana Subijana, la directora. Desde mi casa de Madrid ya hablé con
ella y me informó muy amablemente de que ya no había habitaciones individuales. Me dió
permiso para entrar y recorrer La
Conrería - entrando por la nueva edificación y pisar el patio
interior de nuestro antiguo Seminario y llegar al patio exterior dónde
jugabamos al fútbol, baloncesto, ping-pong, y frontón con pelota vasca de
cuero.-Ahora existe una buena piscina y una maravillosa panorámica del mar
Mediterráneo. ¡Qué delicia! Sentado en un banco de piedra
desgastada, me comí un bocadillo de paté y queso, mientras miraba la fachada
donde aún está NUESTRA VIRGEN DE MONTALEGRE, presidiendo la entrada al interior
del Seminario. A Ella le cantabamos LA
SALVE los sábados y en el mes de mayo.
Pude ir saludando a los primeros ex-seminaristas. Al
entrar al salón de actos, ya ví mucha gente....Me senté en la 2ª fila de la
derecha. Lo ví y escuché todo perfectamente. No reconocí a ninguno. Ni tampoco
a los que estaban sentados en el escenario detrás de una mesa. (solamente al
autor, a quien saludé al entrar). Saludé a Mosén Nicolau para
preguntarle en que años fué "Seminarista". ¡Era un FUNDADOR! Y a
mi viejo y querido amigo de juventud Antonio Oriol no le reconocí. Luego,
al ser presentados por sus nombres y hablar ellos mismos sobre sus vidas en La Conrería, me llevé una
grata sorpresa: mi amigo había sido ordenado sacerdote y RECTOR de La Conrería (...) Por todo
ello, GRACIAS por el esfuerzo de editar ESTE LIBRO FOTOGRÁFICO, incluídas
las cartas y comentarios .
F. Octavio
Sánchez Jiménez, ex-seminarista, 1947-1952
