En un llibre entrevista publicat el 1992 trobem aquestes paraules sobre el Seminari de la Conreria: "El Seminario Menor de Barcelona está situado en los montes de la Conrería, a unos quince quilómetros al norte de la ciudad. Es un lugar sano; pero en aquellos años (1942-1946), sin estufa alguna, los inviernos se pasaban mal. Los operarios diocesanos eran los educadores y profesores. A pesar de las críticas que se les han hecho, yo conservo buen recuerdo de cada uno de ellos. Les estoy agradecido.
Del Seminario Menor tengo un recuerdo agridulce. La disciplina era dura, como lo era en cualquier internado de aquellos años. Una falta grave o la reiteración de faltas leves merecían la expulsión. Pero fue, precisamente en aquel tiempo que yo comencé a conocer más a Jesucristo y a amarle sinceramente. Fue tiempo de fervor. El fervor que, tal vez, falta actualmente en algunos de nuestros seminarios. Es necesaria la razón, sin duda, pero no se puede olvidar el corazón. En la formación cristiana de los jóvenes el afecto tiene su importancia." (Julián Sesmero, "Buxarrais. Confesiones de un obispo que no quiso serlo". Valencia: Edicep, 1992, p. 29).
Hem cregut interessant i curiós reproduir aquest fragment sobre la Conreria, perquè Mons. Buxarrais ha estat un personatge molt destacat dins l'església espanyola en el darrer terç del segle XX. Encara viu a Melilla, amb quasi 92 anys d'edat.